El Código de Buenas Prácticas Mercantiles incrementa la eficiencia del sector agroalimentario español

El Código recoge los pilares necesarios para que la cadena alcance un mayor equilibrio entre los distintos eslabones y supone una gran aportación para la creación de riqueza y de sostenibilidad económica, social y medioambiental

11 enero 2017.- La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha asegurado que el Código de Buenas Prácticas Mercantiles va a significar un paso decisivo para incrementar la eficiencia del sector agroalimentario español, en un marco de seguridad basado en el interés mutuo.  

Isabel García Tejerina ha presidido, en la sede del Ministerio, el acto de adhesión de empresas al Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la Contratación Alimentaria, un sistema de autorregulación que establece los compromisos generales a asumir por los operadores en los contratos y los acuerdos comerciales.

En su intervención, García Tejerina ha destacado el esfuerzo del Ministerio y de las asociaciones representativas de los agricultores, las cooperativas, las industrias y la distribución alimentaria para poner en marcha este Código, al que ya se han adherido 78 entidades, y varias más se encuentran en proceso de incorporación. En particular, la ministra ha reconocido la decisión de adherirse a un Código voluntario y el trabajo necesario para su puesta en marcha. 

PRINCIPIOS BÁSICOS

El Código de Buenas Prácticas Mercantiles establece una serie de principios básicos en las relaciones comerciales, como son el equilibrio y la justa reciprocidad entre las partes, la libertad de pactos, la buena fe, la equitativa distribución de riesgos y responsabilidades, la cooperación y la transparencia, así como el respeto a la libre competencia y la sostenibilidad de la cadena alimentaria.

Estos principios, ha apuntado la ministra, “son los pilares necesarios para que la cadena alcance un mayor equilibrio entre los distintos eslabones, y que contribuya a que contemos con un sector fuerte y cada vez más competitivo”. 

Además de los compromisos generales, el Código aborda las prácticas en relación a aspectos clave, como la negociación, la gestión, la innovación y la información. Asimismo, incluye compromisos adicionales relacionados con la garantía de la calidad de los productos, la reducción de los desperdicios alimentarios y el refuerzo de la cooperación ante situaciones de crisis de mercado.

En este marco, la ministra ha precisado que también se establece un sistema de resolución de conflictos, que obliga a las empresas adheridas a diseñar un procedimiento interno para su resolución. 

LEY DE LA CADENA ALIMENTARIA

Según ha recalcado, estos cambios exigen trabajo, compromiso y una práctica diferente a la que hemos tenido durante mucho tiempo. La ministra ha señalado que estos cambios ya se avanzaron con la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, una norma pionera en Europa que está sirviendo de ejemplo para actuaciones comunitarias y de otros países.

En este sentido, la ministra ha indicado que la ley de medidas ha definido un modelo que se ha demostrado eficaz. Por una parte, con la creación de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), que ayuda y vigila el cumplimiento de la ley. Y, por otra, con el Código de Buenas Prácticas Mercantiles. 

García Tejerina, que ha recalcado el intenso trabajo desarrollado para redactar el Código, ha puesto en valor el esfuerzo de los operadores que han recibido el reconocimiento formal por su adhesión: grandes organizaciones de productores; PYMES y grandes industrias; federaciones de empresarios detallistas; la Confederación Española de Comercio y la distribución organizada.

ÉXITO DEL SECTOR AGROALIMENTARIO

Para la ministra, todos ellos son partícipes e impulsores del éxito del sector agroalimentario español, un sector que crea riqueza en todos sus eslabones. En concreto, las leyes de la Cadena e Integración Cooperativa, las Líneas Estratégicas de Internacionalización, y otras muchas iniciativas han contribuido a crear un clima de confianza y seguridad que ha permitido al sector ganar cuota de mercado y ofrecer unos datos positivos relevantes. 

En este contexto, la ministra se ha referido al incremento de la renta agraria, que en 2016 ha alcanzado la cifra de 25.255 millones de euros, con un incremento del 5,1% sobre 2015. También ha comentado que los datos de la industria son muy positivos, con una facturación en 2015 de 95.000 millones de euros (un 1,6% superior al año anterior), y con la creación de 10.000 puestos de trabajo.

Fuente:  MAPAMA