Las ayudas a la pesca mundial, en juego en la ambiciosa negociación de la OMC

Los países de la Organización Mundial del Comercio (OMC) persisten en una ambiciosa negociación, de casi dos décadas, sobre las ayudas a la pesca para acotar su capacidad y combatir la actividad ilegal, pero la pandemia y las divisiones dificultan un acuerdo que las flotas miran con preocupación

El origen de las discusiones sobre los subsidios pesqueros comienza en 2001, cuando la OMC acordó iniciar la Ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial, en un mundo marcado por los atentados del 11 de septiembre en Nueva York.

La COVID-19 y las dificultades logísticas para la negociación, con contactos virtuales, complican los resultados, por lo que no se espera un acuerdo hasta 2021.

La sensibilidad ambiental marca esta negociación, cuyo objetivo es frenar la “sobrecapacidad” de las flotas pesqueras mundiales y acabar con la lacra de la pesca ilegal.

Los países están de acuerdo en impulsar un compromiso, pero las diferencias surgen al abordar cómo, según declaran a Efeagro  fuentes diplomáticas. Los pescadores de la Unión Europea (UE), entre ellos los españoles, ven con preocupación estas discusiones, que se desarrollan en Ginebra (sede de la OMC). Su inquietud radica en que están en entredicho las desgravaciones fiscales y las bonificaciones a los combustibles que perciben los profesionales del mar.

Principales actores y sus posturas

En las negociaciones están interviniendo activamente los 25 principales países pesqueros del mundo salvo Irán (no está en la OMC).

Según la organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO), China es el primer productor pesquero mundial, seguido por Perú, Indonesia, Rusia y Estados Unidos; España, primera potencia de la UE, ocupa el puesto 19; Chile ocupa el puesto 9, México el 12 y Argentina el 20.

En estas discusiones, la UE -con apoyo de Japón y Corea- defiende la opción de una lista con subsidios, según sean negativos o positivos; en este segundo grupo entrarían los destinados a paliar desastres naturales, a la recuperación o a la investigación, según fuentes comerciales.

Por el contrario, un conjunto de naciones latinoamericanas –Colombia, Costa Rica, Panamá, Perú, Uruguay, Argentina– defienden otra fórmula, según la cual los subsidios deberían prohibirse o admitirse según el estado de cada caladero.

Por otro lado, EEUU y Brasil defienden la idea de poner “un techo” a las subvenciones, pero con propuestas diferentes.

China también tiene su propia posición con topes a las ayudas, pero con menos respaldos.

Un estudio realizado por varias universidades (de China, Canadá y EEUU) sitúa a China como el principal receptor mundial de ayudas pesqueras (6.205 millones de euros), seguido por la UE, EEUU, Corea y Japón -con montantes aproximados de 3.000 millones de euros, respectivamente, aunque contarían las bonificaciones por el gasóleo-.

Demandas de los pescadores españoles y de la UE

El Fondo Europeo Marítimo y Pesquero (FEMP) financia las ayudas a la flota comunitaria; España obtuvo 1.161 millones de euros para 2014-2020, el 20,2 % del total.

El director general de la patronal europea de armadores Europeche, Daniel Voces, señala que la mayoría de los criterios que debate la OMC no son preocupantes, pero sí inquieta la posibilidad de que se eliminen los regímenes de desgravación para el uso del combustible (como el gasóleo profesional español).

Las bonificaciones fiscales “no son un riesgo para los caladeros” y su eliminación sería “un golpe muy duro” que puede poner en riesgo la supervivencia de los pescadores, según el presidente de la Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras y secretario general de la española Cepesca, Javier Garat.

El gasóleo representa hasta el 40 % de los gastos de explotación de muchos barcos, según Voces.

Ha insistido en que la UE tiene la política “más transparente del mundo” con mayor regulación de capacidad para no sobreexplotar los mares, y prueba de ello es que “un 50 % de las especies” están en mejor situación que hace diez años.

La UE, según Voces, está defendiendo su sistema legislativo y esta opinión de los pescadores en Ginebra.

El responsable de Europêche ha recalcado que las exenciones fiscales no son ayudas; pero apunta que China sí está concediendo apoyos directos a su flota que no hace públicos.

“Se critica a la UE y no se habla de otros países como Rusia, que el año pasado aprobó incrementar un 30 % el gasto en inversión de nuevos barcos”, sin atender a los criterios de la OMC, según Voces.

Fuente. EFEAGRO