La Fundación Adecco ha hecho público recientemente, un informe, en el que asistimos a una nueva generación de consumidores críticos que valoran cada vez más el comportamiento ético de las marcas. El ciudadano exige una conducta responsable con el entorno en el que operan, ya sea medioambiente, trato a los trabajadores, relación con la ciudadanía etc.

De este informe se deduce que el concepto RSE –Responsabilidad Social Empresarial- es desconocido para la mayoría de ciudadanos, un 60% afirma no estar familiarizado con las siglas, aunque el concepto si está instalado en la conciencia ciudadana. De hecho, el 96% de los encuestados considera que las empresas tienen la misma responsabilidad que el Gobierno a la hora de dar respuesta a los retos del entorno; desempleo, desigualdad social, sostenibilidad medioambiental, corrupción, etc.

El informe recoge que los ciudadanos, un 70% concretamente, consideran que la ciudadanía tiene mucha o bastante responsabilidad cuando se trata de reaccionar ante los desafíos que plantea la sociedad. Sería el tercer agente en responsabilidad. El cuarto agente son los medios de comunicación, donde un 63% de encuestados cree que tienen mucha o bastante responsabilidad y un 62% cree que es el tejido asociativo quien tiene responsabilidad ante estos desafíos.

Sanción a marcas no responsables

Un porcentaje alto, un 63% de consumidores penaliza a las marcas que no considera responsables. Un 50% deja de adquirir el producto, mientras que un 10% deja de adquirirlo y emite opiniones negativas en foros y redes sociales. Y además, un 3% va más lejos y pone en marcha iniciativas como la recogida de firmas o protestas en contra de la marca.

El consumo responsable ha aumentado 1 punto porcentual, con respecto a 2015. Por edades, los jóvenes son los más exigentes con el comportamiento de las marcas, mientras que entre los mayores de 40 años esta exigencia se vuelve más laxa. Concretamente un 70% de consumidores entre 18 y 35 años sancionan a las marcas menos responsables y se reduce hasta el 52% a partir de los 40 años. Los más críticos son los nacidos a partir de 1980 o Milenials, quienes no dudan en dejar de consumir una marca tras una mala experiencia.

Un 56% de los encuestados que tienen empleo, cree que la empresa en la que trabaja es socialmente responsable. No obstante un 56% sitúan a las empresas por debajo de las europeas en cuestión de responsabilidad y un 36% las evalúa de forma similar.

Fuente: Fundación Adecco